lunes, 24 de febrero de 2014

EN EL TAJO


Hacia 1965 vine de excursión a Toledo con mi tío, hermano de mi padre. Los sábados y domingos recogíamos a mis primas del colegio Santo Ángel, en la calle Tutor de Madrid y nos íbamos a visitar los pueblos y ciudades de alrededor. A mí me encantaban esos viajes porque descubría muchas cosas desconocidas y además comíamos fuera de casa, algo extraordinario para mí.

Mi tío Manolo tenía un Opel Record en aquel entonces. Se veían muy pocos coches de ese modelo por la carretera. Yo no sabría decir cómo conducía; en aquel entonces no me fijaba en esas cosas. Sólo me daba cuenta de que alguna vez gritaba “cateto” a alguien. Lo que lo alteraba sobremanera era cuando cerrábamos las puertas con demasiada fuerza.

En Toledo habíamos estado otra vez visitando el Alcázar y la catedral. Hacía estas visitas por sus hijas. Él consideraba importante que conocieran esas cosas. Supongo que tendría que “tragar mucha quina” como decía él visitando el Valle de los Caídos o, en el Alcázar de Toledo,  leyendo el diálogo absurdo que mantuvo el general Moscardó(1), impreso en grandes letras al lado del teléfono supuestamente utilizado. Él era socialista, ateo y republicano y no lo ocultaba.

En esta segunda visita a la ciudad donde más tarde nacerían mis nietos, nos dedicamos en cambio a recorrer los alrededores, el Valle y el río. Era el mes de mayo y todavía no hacía tiempo de baño pero sí de pasear por las riberas y la zona utilizada entonces por los toledanos como playa. Ahí, mi tío me hizo la foto que os muestro. Me acordé de ella al leer el precioso comentario de mi amiga Claudie en la entrada que había escrito Eduardo Sánchez Butragueño sobre el río Tajo en su blog     http://toledoolvidado.blogspot.com.es/.

Entonces busqué esa fotografía, la escaneé y se la envié al famoso bloguero. Me lo agradeció y me anunció que la incluiría en la entrada relativa al Tajo.

Yo no tenía muy claro el lugar desde donde estaba hecha, no reconocía el edificio que hay detrás. Eduardo la situó inmediatamente. Se trata de una antigua central eléctrica. 

Hace un par de domingos fuimos a buscar ese edificio andando desde casa. El río venía bastante cargado de las copiosas lluvias de este invierno. También tuvimos la suerte de encontrar algunas lepistas entre los pinos que nos sirvieron para un buen revuelto.

Ni que decir tiene que aproveché para fotografiarme en el mismo sitio ¡¡¡49 años más tarde!!!







(1) El general golpista hace responsables de las muertes a los defensores de la legalidad.


1 comentario:

  1. Me encanta esta entrada. Y además, donde pone lepistas yo he leído leperas.
    Besos

    Imo

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