sábado, 22 de enero de 2011
DULCE ESPERA
Vivo la dulce espera de un nuevo nieto. Será el tercero. Ya tengo dos nietas de mi hija, pero este es de otro hijo y además será varón, así que es un poco como si volviera a ser el primero otra vez.
Mi nieta Daniela hace algún tiempo que me da besos espontáneos y Leonor, siempre tan madura, me sorprende continuamente con cosas de niña grande, de adulta, incluso.
Ahora también por primera vez estoy experimentando lo difícil que es llevar a un lienzo lo que capta la vista, lo percibido por una mirada. Estoy intentando mi primer paisaje al óleo. Cuando lo tenga terminado, vendrá pintiparado para ilustrar mi escrito "El camino". Solo habría que poblarlo de algunas encinas para adehesar sus lomas.
Son nuevas experiencias que me tienen embelesada. ¿Será por eso por lo que no hace acto de presencia la inspiración?
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Estas viviendo una etapa preciosa, disfrutando de los tuyos y en la espera de ese nuevo pequeño. Con todo eso la inspiración la tendrás cuando menos te lo esperes.
ResponderEliminarY además está jubilada. Tiene "posibles", tiempo, es guapa, está, y se siente, joven. ¡Artista, que eres una artista!,esto lo digo en el sentido real de la palabra.
ResponderEliminarPluky, después de estas palabras, solo me queda por decirte: ¡gracias! (pelín exagerado, pero siempre agradable)
ResponderEliminarPues a mí, sí que me has obligado a ir al diccionario. No conocía esta palabra "pintiparado". Preciosa, por cierto.¡Ojalá pudiera añadir cada día una sola palabra a mi siempre incompleto castellano!
ResponderEliminarY nació LUCAS... Enhorabuena, y después de la dulce espera, la emoción frente a la maravilla de la naturaleza, para los abuelos, padres y sobretodo par la madre...¡Que aventura!
ResponderEliminarPues sí, es toda una aventura empezar a seguir la evolución de un pequeño cachorrito. La pena es que hay que abandonar este seguimiento en un momento dado.
ResponderEliminarQue mejor sitio para darte de nuevo la enhorabuena por el nacimiento de Lucas.
ResponderEliminarDeseo que todo siga bien.
¿Cuando dices en tu comentario, Manuela " Abandonar este seguimiento" ¿Te refieres al niño que se hace mayor y autosuficiente con el tiempo? O bien al momento en que debes irte a su casa y dejar a la joven madre son su bebe?
ResponderEliminarLa palabra " seguimiento" lleva a la primera hipótesis, pero no estoy segura.
Claudie, me refiero en esta ocasión a cuando hay que abandonar este seguimiento definitivamente. Cuando mueres y no puedes ver crecer hasta donde te gustaría a tus nietos. Ya conoces mi pesimismo. Nunca pierdo de vista que mi madre no pudo conocer toda la evolución de sus nietos, se fue demasiado pronto. Ya sabes que soy poco reflexiva y si en ese momento es ése el pensamiento que se me pasa, lo comento.
ResponderEliminarEn cuanto a tu primera pregunta, también lo tenía en mente. Cuando el niño se va haciendo mayor, lógicamente te va alejando de él. Lo definitivo es cuando se va de casa. Pero eso es lógico, todos lo hemos hecho y lo encuentro natural. Las relaciones familiares siguen su curso pero de otra forma.
Envueltos en el clima que produce un nacimiento, solemos olvidar este trágico "momento dado".
ResponderEliminar¿Seremos unas avestruces, ante tanta lucidez de tu parte?
Me abrumas.
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